Nace en Valencia, Estado Carabobo, 4 agosto 1926, en sus primeros años de formación primaria alterno la educación formal con sus primeras pinturas, dibujos e ilustraciones.
En 1942 obtiene su primera distinción al ilustrar un libro de poesía en el I salón de exposición de poemas ilustrados, organizado por el Ateneo de Valencia, estado Carabobo. Al año siguiente en este mismo salón realiza su primera exposición que incluye paisajes, bodegones, flores y motivos de carácter fantástico.
En 1943 obtiene la medalla de honor en el I salón Arturo Michelena con “Hojas rojas”. Las obras de este periodo evidencian su interés por el cubismo, sin abandonar la representación figurativa.
En 1945 se traslada a Mérida e inicia estudios de Medicina. En 1949 se muda a Caracas para continuar sus estudios de Medicina y se integra al grupo del taller libre de arte y junto con otros artistas funda la revista taller, vigas se inclinó entonces por un trazo agresivo y el raspado como expresión plástica, dejando en ocasiones áreas de la tela sin tocar. Para estos años trabaja su serie Las Brujas, síntesis visual proveniente de las vanguardias artísticas de comienzos de siglo con la estética de las culturas precolombinas. “…Lo sombrío de sus climas plásticos, sus invenciones formales, geométricas y a un tiempo orgánicas, óseas a la vez que musgosas; sus desoladas nocturnidades, recogen la imagen de la tierra a la manera mítica en que la teme el animismo colectivo” (Nazoa,1970)
En 1952 obtiene el Premio Nacional de Artes Plásticas con Gran Bruja.
En 1953 se establece en Paris y es invitado a tomar parte en el proyecto de la síntesis de las artes para la ciudad universitaria de Caracas, para la cual realizó cinco murales. En esta etapa predominan en sus creaciones los colores oscuros, metería más densa, dibujo más acentuado, y formas cada vez más abstractas. En 1957 regresa a Venezuela y expone en la Sala Mendoza; para esa época realiza una serie de objetos, pinturas geométricas de acabado gestual que rememoran las formas contundentes del arte prehispánico.
A partir de 1962 incursiona en el informalismo maté rico y realiza una serie de aguafuertes con la técnica del agua azúcar.
En 1964 recibe nuevamente el premio Arturo Michelena con una obra informalista, Parameras. Su experiencia informalista enriquece su reencuentro con la figuración y a mediados de los años sesenta retoma las formas esenciales de sus brujas en una serie de “panagrestes”, ejecutada con pinceladas violentas y carga matérica, interrumpida brevemente a finales de la década por un retorno a la abstracción.
En 1970 se establece en Caracas y reanuda su trabajo en las series María Lianza y Señoras. A comienzos de 1972 viaja a estados unidos y se dedica a desarrollar un conjunto de serigrafías.
En 1979 , la GAN realiza una muestra antológica de su obra realizada entre 1943 y 1977. En 1981 se incorpora al grupo proposición 20, y exhibe en el MBA tapices diseñados por él y ejecutados en los talleres de St, Cyr en Francia, los cuales continua posteriormente con tapices tejidos por artesanos de Toluca y después con un conjunto realizado en España. Paralelamente ejecuta numerosas piezas en cerámica: relieves en placas de refractario y gres, moldes para platos, óxidos a la parafina bajo cubierta. “Reaparecen los seres fantásticos que ocupan todo el espacio de sus obras pero ahora reducidos a la dimensión de un talismán”. (Pineda, 1981). Supervisa la ejecución de un relieve-mural en gres encomendado por el ateneo de caracas y en 1983 realiza guaches y gráficas, inspiradas en Simón Bolívar.
En 1985 presenta sus primeras esculturas en bronce, consecuencia de las experiencias en cerámica de inicios de los ochenta. En 1986 trabaja en torno al tema de la crucifixión, la paz, la madre, el niño y los pájaros. El espacio en la obra de Vigas comienza a poblarse de signos y formas no figurativas, a partir de planos irregulares que se orientan hacia composiciones geométricas cada vez más lineales pero de carácter gestual.
En 1990 el MACCSI organizó una retrospectiva con más de 200 obras entre pinturas, esculturas, tapices, cerámicas, joyas y artesanía. Este año es invitado a Montreal (Canadá) y participa en la muestra “Latinartca 63: maestros del arte latinoamericano contemporáneo”. En 1992 viaja a Mónaco y participa en el XXVI premio de arte contemporáneo, donde recibe el primer premio con crucifixión VII. En 1993, en el palacio de la moneda en París, organiza la muestra “Vigas desde 1952 hasta 1993” con 137 piezas de arte. En 1995 expone en “Tapicerías de hoy sobre muros de antaño” (Francia y Tokio) , un tapiz realizado con ocasión de los juegos panamericanos de 1983. En 1996, la muestra “Oswaldo Vigas : un hombre americano” es presentada en la casa de las Américas de la Habana con motivo del tercer aniversario de la casa Simón Bolívar. En 1999 es homenajeado en la séptima edición de la FIA. En los últimos años de su carrera su obra tiende a la simplicidad, con algunos toques de color y grandes zonas de tela sin tocar. Muere en el año 2014, en Caracas, Venezuela.